Por las puertas de Multicines Tenerife rodaban algunas personas en albornoz, gafas de sol, zapatillas de andar por casa… Y es normal que esa situación extrañara a los que pasaban por ahí, si no se ha visto «El Gran Lebowski» (Joel y Ethan Cohen, 1998). Aquellos con bata iban caracterizados de «El Nota», protagonista de la película, que se proyectó el pasado 31 de mayo.
La sala 17 se encontraba repleta de gente impaciente por ver este film en la gran pantalla. Antes de comenzar, aparecieron unos invitados de última hora, cortesía de Ksa Mario, patrocinador de estos eventos: unos rusos blancos, bebida favorita de nuestro Lebowski principal, que sirvieron para completar el disfraz de los presentes «Notas».
Durante la proyección, las risas inundaron la estancia, secuencia tras secuencia. Como comentaron los ponentes en la charla posterior (Manuel Díaz Noda, Fabián Orán y Víctor Conde), «El Gran Lebowski» se ha convertido en una película de culto, para sorpresa de las malas críticas recibidas en su estreno, circunstancias que también se dieron, por ejemplo, con «Blade Runner» (Ridley Scott, 1982). Manuel Díaz señaló que en aquella época las comedias no se apreciaron tanto.
Un aspecto a destacar de esta cinta es su combinación de comedia con novela negra, como así indicó Fabián Orán. Nos encontramos con un ricachón que contrata a un detective, en este caso el vago de Dude, para buscar a su mujer. Se trata de una burla o parodia al género noir. Orán nombró un subgénero de este, el stoner noir, donde en lugar de un investigador como el personaje de Jack Nicholson en «Chinatown» (Roman Polanski, 1974), aparece un fumado como es el protagonista. Miguel Ángel Rodríguez, moderador del coloquio, añadió que lo último importante es el caso en sí.
Al hablar de los directores, todos los presentes coincidieron en que los Cohen han construido un universo propio y característico con sus creaciones. Víctor Conde describió a estos famosos hermanos como “grandes cineastas que deciden mostrarte un solo fragmento de un mundo complejísimo, donde te quedas con ganas de conocer más y, sobre todo, de los personajes secundarios”. Estos últimos son vitales. “Se te quedan en la memoria, como Jesús Quintana”, resaltó el moderador. Con ello, el casting fue todo un acierto. No podríamos imaginarnos, por ejemplo, a otro Walter que no fuera John Goodman. Los comentaristas colocaron este filme en el top 3 de los Cohen.
Para alguien que la ve por primera vez, como fue mi caso, a lo largo de la película se repite una y otra vez ese sentimiento de “¿qué coño está pasando?”; sin embargo, Rodríguez definió muy bien la realidad que se vive al visualizarla: “hay contradicciones por todos lados, es surrealista y esto es lo que engancha”. Se pueden resaltar múltiples secuencias, y así lo hicieron los partícipes, enumerando entre las tres más destacables las escenas oníricas, la presentación del personaje de John Turturro y el esparcimiento de las cenizas. Rodeada de «Notas» y rusos blancos, esta fue la experiencia perfecta para verla.
En los próximos meses, Charlas de Cine tiene programados distintos eventos. Entre ellos, el 7 de junio, «El fotógrafo de Mauthausen» (Mar Targarona, 2018), a la que asistirá Diego Navarro, autor de la banda sonora, quien explicará cómo se realiza dicha labor; además, será presentada por Luis Pérez Gil, experto en conflictos bélicos. Asimismo, el 14 de junio se proyectará en 4K «Lawrence de Arabia» (David Lean, 1962). Saltando al 21 de junio, por motivo de su 20 aniversario, se trae a la gran pantalla de nuevo «Matrix» (Lana y Lilly Wachowski, 1999). Y un nuevo ciclo este junio, esta vez dedicado a Tim Burton, con «Ed Wood» (1994), «Big Fish» (2003) y «Mars Attacks!» (1996). Este es un pequeño recorrido de las próximas actividades que se pueden seguir en la página de Facebook de Aula de Cine ULL.