«The Ring 2»: El vídeo de la muerte, Parte II

Tras el éxito de “The Ring (La señal)”, el propio Hideo Nakata fue reclutado por Hollywood para que se pusiera tras las cámaras de su creación. Nakata, con un mayor conocimiento del mito de Samara y del género que Gore Verbinksi, dejó atrás las sutilezas de éste para entregar un film de horror con una mayor sucesión de sustos, apariciones del fantasma de Samara y referencias varias a dos clásicos del género del terror psicológico USA: “La profecía” y “Poltergeist”, la original de Tobe Hopper. Nakata aprovechó además, para mezclar en «The Ring Two» tres de sus icónicas obras niponas: «Ringu» y «Ringu 2: Rasen», y “Dark Water”. Ésta última tendría su propio remake sin Nakata, con Jennifer Connelly, dirigida por el brasileño Walter Salles en 2005, el mismo año que la secuela del film que hoy nos ocupa.

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Naomi Watts no tuvo apenas reparos para volver, más aún sabiendo que sería un éxito, como poco, igual que el de la cinta primigenia. El niño David Horfman ampliaría su protagonismo en este film, en una actuación mucho más fría que en el original, aunque con su parte de razón. El interprete televisivo Simon Baker («El mentalista»), Sissy Spacek (la inolvidable «Carrie» de Brian De Palma) y Elizabeth Perkins completarían el elenco de actores. Se nota en «The Ring Two» -rebautizada como «La señal» en España de forma inentendible, puesto que el título original («El círculo») hace mención a la forma del pozo desde el fondo en varios planos y en cómo es visualizado en la “dichosa” cinta de vídeo- un mayor ímpetu por parte de Nakata por entregar un film de terror y sustos del sillón (jumpscare), con varias escenas realmente desasosegantes y algunas realmente logradas: ojo a cuando Samara sale del televisor para llevarse a Aidan con él en una de las pesadillas del niño, a éste haciendo fotos en bucle delante de un espejo en un momento anteriormente copiado por James Wan en “Saw» (2004) y, cómo no, al ataque de los ciervos al coche de Rachel y Aidan, muy deudor de la mitiquísima secuencia del Zoo de «La profecía», mito ineludible del género de cintas de horror con niño inquietante. Para el recuerdo, también, los auto-guiños de Nakata, el momento de Samara en pleno arrebato de contorsión subiendo el pozo tras Rachel con ese sonido tan tétrico que acompañaba a todas sus apariciones.

En términos de taquilla esta secuela quedaría muy lejos de los números del original, solo 161 millones a nivel mundial por los casi 250 de la firmada por Verbinski. Ello cerró las puertas a Nakata para proseguir su andadura en EEUU, y dejó la saga en stand-by hasta el 2017, con «Rings», mitad reboot, mitad precuela.